Conectando con tus Hijos a un Nivel Emocional: 3 Herramientas Prácticas para Padres
¿Quieres mejorar la relación con tus hijos? ¿Te gustaría crear unos lazos afectivos que perpetúen en el tiempo?
Hoy hablaremos de cómo podemos conectar con nuestros hijos a un nivel emocional, entendiendo sus verdaderas necesidades. Lo que aprenderás hoy te será de vital importancia si quieres volver a tener una relación extraordinaria con tu querido hijo y poderle acompañar en su desarrollo emocional.
Te enseñaré la verdadera educación emocional, que no se basa en colores y en caras tristes. Al final, te daré 3 herramientas prácticas y sencillas que puedes implementar a partir de hoy para crear ese vínculo tan especial.
El vínculo que creamos con nuestro hijo en sus primeros años de edad marcará para siempre la relación entre padre e hijo. Los lazos familiares que se basan en el amor verdadero, el afecto, la comprensión, el respeto, el buen trato, la empatía, la tolerancia y aceptación, fortalecen la relación entre los progenitores y sus hijos, crean un ambiente familiar saludable donde el niño puede crecer y desarrollarse en total seguridad.
Sin embargo, muchas veces no ocurre de esa forma. Los padres, después de un buen comienzo, cuando el hijo aún es un bebé, cambian su forma de actuar con el niño. Empiezan a exigirle que sea de una determinada forma, que se porten según unos criterios educativos anticuados y dañinos para la salud mental del niño, que van en contra de su óptimo desarrollo emocional. Tienen miedo de perder el control, de que el niño de adulto no esté a la altura de las grandes expectativas que tenemos sobre él.
Empezamos a tener expectativas, a ser exigentes, a ser intolerantes. Perdemos la paciencia ante las fuertes expresiones emocionales de los niños, que estigmatizamos con la palabra rabieta o berrinche, en lugar de entender como funciona el cerebro infantil y empezar a conectar con nuestro hijo desde la comprensión de su desarrollo cerebral y sus verdaderas necesidades fisiológicas.
Luego, cuando surgen los problemas y no sabemos qué hacer, buscamos soluciones rápidas, libros y post con técnicas rápidas. Hasta un video de 7 minutos nos parece muy largo, preferimos material rápido con soluciones mágicas inmediatas. Todo eso nos lleva a más confusión y al final seguimos perpetuando en los mismos errores y con una sensación de culpabilidad, de que lo estamos haciendo mal.
Créeme, yo también he estado ahí, a pesar de tener una formación amplia de psicología infantil y pedagogía. Hasta que descubrí los principios educativos de la Educación Real de Tania García. Decidí formarme con ella para ser mejor padre y mejor profesional. Gracias a esa formación de valor, descubrí la esencia de la educación infantil, que es el crecimiento personal de los padres.
La crianza de los hijos no tiene nada que ver con métodos educativos, reglas, premios, castigos y consecuencias, que lo que hacen es manipular el cerebro del niño y cargarse su óptimo desarrollo emocional.
El niño nace perfecto así como es, pero a causa de una programación cerebral errónea durante su infancia y adolescencia, pierde su verdadera esencia y se desarrolla con patrones y creencias equivocadas, que lo convertirán en un adulto con un total desconocimiento emocional, con dificultad en la relación y algunos con patologías más graves.
Hay muchos adultos que viven infelices, con angustia y ansiedad. La única solución que encuentran y que la sociedad les pone a disposición para tapar esa angustia son herramienta de rápido consumo, como shopping, fármacos, alcohol y otras drogas legales o ilegales, relaciones sexuales rápidas sin sentimiento, obsesión por el trabajo, por el aspecto físico, redes sociales, juegos de azar, y otras decenas de medios que no solucionan el problema, más bien lo empeoran.
Eso es debido a que perdimos nuestra esencia en nuestra infancia, a causa de la educación que recibimos en las familias y en la escuela, aceptándola como válida, que se basa en principios que perjudican el correcto desarrollo del niño.
¿Quieres saber cómo volver a conectar con tu hijo para que pueda recuperar su esencia y descubrir su verdadero ser?
El primer paso es desaprender todo lo aprendido en el pasado. Si quieres asimilar nuevos principios educativos que te ayudarán a conectar con tus hijos, creando lazos que perduran para siempre, debes dejar tus creencias y patrones mentales que te han acompañado hasta ahora sobre la crianza de los hijos.
Para ver cambios en tu vida familiar, necesita deshacerte del pasado, vaciar el vaso lleno de agua turbia para poder poner agua nueva y limpia. En nuestra academia online para padres de familiaycrecimiento.com, te acompañamos en ese proceso, ofreciéndote asesoría y formación sobre los principios de la educación real. Te dejo la información en la descripción. Tenemos una promoción especial para ti.
Aquí te desvelaré gratuitamente tres simples principios básicos que puedes aplicar a partir de hoy para ver cambios en la relación con tus hijos.
El primero es el siguiente: Deja de obsesionarte para el futuro de tu hijo, vive el momento presente y disfruta de tu hijo ahora. La infancia y la adolescencia no son una preparación para la vida adulta. El niño es una persona ahora, no te preocupes tanto para que aprenda idiomas, o cultura general, deja que disfrute de su infancia, que juegue en libertad, sin reglas ni condicionamiento.
Juega y disfruta con él, pasa buenos momentos juntos de diversión. Jugar con tu hijo a diario, un mínimo de 30 minutos, es la fórmula mágica para crear un lazo de afecto duradero con tu hijo. Los niños miden el amor que les damos con el tiempo que pasamos con él. Deja el disfraz de adulto de un lado, saca el niño que está dentro de ti y empieza a disfrutar con tu hijo.
El segundo es: Lee todos los días a tu hijo por 20 minutos, a cualquier edad. Cuando lees a tu hijo un cuento o una novela, que no sea manipulativa ni pseudo educativa, se crea un vínculo especial con tu hijo. La lectura tiene enormes beneficios para el niño, que te explicaré en otra clase, dado que son muchos.
Pero ahora lo más importante es saber que el niño, cuando escucha nuestra voz calmada y relajada mientras le leemos, libera en su interior hormonas de placer que le hacen disfrutar del momento y crear una conexión sana y permanente con nosotros.
Elige un momento ideal durante el día y conviértelo en una rutina diaria. Antes de acostarse es un momento propicio, dado que la lectura concilia el sueño. Practícalo a diario durante años y verás que al mismo tiempo tu hijo amará tanto la lectura que empezará también a leer por sí solo, sin que eso sustituya vuestro momento de lectura.
Por último, elimina todo tipo de exigencia, expectativa o ilusión sobre la vida de tu hijo. Tu niño es especial y único así como es, no necesita demostrar nada ni portarse de una determinada forma para recibir amor. Ama a tu hijo de forma incondicional, haga lo que haga, sin exigirle nada, que aprenda inglés para su futuro, que destaque en algún deporte o que sea un estudiante modelo.
Para que tu hijo descubra su verdadera esencia, sus gustos y sus pasiones, necesita escuchar a su voz interior, sin tener la presión del exterior, para que cumpla nuestras expectativas, para que sea de una determinada forma. Amar a los hijos es aceptarlo así como son, guiarlos para que descubran por sí mismo su camino, sin interferir en él. Diferénciate de los demás para el bien de tu hijo, él te lo agradecerá.
Comenta aquí abajo si quieres que te brinde más herramientas y comparte ese video con por lo menos 5 personas a las cual pueda interesar, para ayudarme a cambiar las creencias erróneas que tenemos sobre la crianza de los hijos.
Un fuerte abrazo, Chao.
